En enero 2012, sucedió que estaba en casa comenzando año, con el consuetudinario ritual de limpiar y desechar todo lo que durante meses acumulamos y luego se convierte en estorbo y desorden.
Oh sorpresa! cuando en el ejercicio se fue formando una montaña, qué digo, una cordillera de papel, entre los cuadernos del colegio usados por mis hijos, los documentos e informes del trabajo, las revistas y suscripciones del año, los recibos, catálogos, fotocopias, etc. etc. Y me dije: ¿voy a botar a la basura todo este papel? ¿será que todas las familias desechan volúmenes similares que van a parar al relleno sanitario?
Averigüé entonces que los residuos de papel en vertederos y rellenos sanitarios producen enormes cantidades de metano y son grandes contaminantes del agua y del aire.
Averigüé entonces que los residuos de papel en vertederos y rellenos sanitarios producen enormes cantidades de metano y son grandes contaminantes del agua y del aire.
Justo en esos momentos, como ahora, se discutía sobre el calentamiento global, la huella ecológica de las personas, el drama de las ciudades con los rellenos sanitarios, en fin, es un hecho que el reciclaje es una necesidad. Pues bien, yo en ese momento me sentí mal con todo este desperdicio y me decidí a buscar soluciones para el reciclaje del papel, y en una escala de alcance artesanal, decidí no desechar el papel de mi hogar.
Comencé haciendo memoria sobre aquellas canastillas tan lindas que hacíamos con recortes cuando niños y entonces, me dí a la tarea de fabricar y regalar algunas; luego, hice cartucheras y estuches de útiles para los niños; de ahí pasé a realizar carteras de papel tejidas...bueno, llegué a billeteras, monederos, portagafas, cinturones y otros diseños...
Me dí cuenta luego de la gran maleabilidad y nobleza del papel cuando lo llevamos a su estado de pulpa o celulosa, y de ahí comencé una carrera de innovación, para hacer joyas de papel, pedrería de papel y otros objetos.
Así comenzó la gran aventura de MarSo joyas de papel, un oficio lleno de posibilidades y todo un reto para la imaginación. Es muy interesante descubrir desde la propia experiencia, cómo podemos crear algo nuevo y productivo con los recursos que tenemos a nuestro al rededor, tan disponibles aunque sean considerados de desecho. ¿Qué te parece? Comparte si has tenido experiencias similares.




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